TELEBACHILLERATO
COMUNITARIO PLANTEL EUÁN
PORTAFOLIO DE EVIDENCIAS
MAESTRO(A): EDLIN YUSELMI
ACOSTA MARTÍN
ALUMNO(A): ARELY XIJUN CRUZ
EUÁN, TIXKOKOB A 21 DE ENERO DE 2016
CONTENIDO
1.1 EL CUENTO
ORIGEN Y DESARROLLO DEL CUENTO
Antes de comenzar a abundar en
la historia del cuento. Es importante recordar que desde las más antiguas
civilizaciones, el hombre tuvo la necesidad de transmitir oralmente lo que acontecía
y, aunque en un inicio no había una diferencia clara entre ellos los diferentes
subgéneros, hoy se puede clasificar toda la literatura popular de acuerdo con
sus características.
Las primeras obras
consideradas como cuentos, provienen de las civilizaciones de oriente, y a
pesar de que desde la antigüedad existió un sinfín de narraciones con
características diversas que pudieran ser consideradas cuentos, el término
cuento surgió en el siglo XIV.
Durante los siglos XV, XVI y
XVII se dieron a conocer las obras de diferentes escritores, como los cuentos
de Canterbury, de chaucer; contes, de la fontaine; cuentos de mi madre la
gansa, de perrault, y cándido, de Voltaire.
A partir del siglo XVIII, el
Romanticismo se inspiró en la creación del relato corto, y escritores como
charles Nodier, en Francia; Hans Christian Andersen, en Dinamarca; Hoffman, en
Alemania, Edgar Allan Poe, en Estados Unidos y Gustavo Adolfo Bécquer, en
España, todos ellos representativos de este periodo.
En la mitad del siglo XIX,
durante la época realista, el relato costumbrista de ladea y el relato de vida
campesina adquirieron gran interés, siendo algunos de sus representantes
Gottfried Séller, Gongol, Bjornson, entre otros. Para la segunda mitad de este
siglo, el cuento se populariza, estando entre sus principales representantes
Antón Chejov, Gustavo Flaubert, Guy de Maupassant y juan Valera.
LINEA DEL TIEMPO
Cuento popular
El cuento popular: Es una narración tradicional breve de hechos imaginarios que se
presenta en múltiples versiones, que coinciden en la estructura pero difieren
en los detalles, donde los autores son desconocidos en la mayoría de los casos
(aunque puede que se conozca quien lo recopiló). Tiene tres subtipos: los cuentos de hadas, los
cuentos de animales, y los cuentos de costumbres. El mito y la leyenda son también narraciones tradicionales,
pero suelen considerarse géneros autónomos, un factor clave para diferenciarlos
del cuento popular es que no se presentan como ficciones.
La
cenicienta
Hubo una vez una joven muy bella que no tenía padres, sino madrastra,
una viuda impertinente con dos hijas a cual más fea. Era ella quien hacía los
trabajos más duros de la casa, y como sus vestidos estaban siempre tan
manchados de ceniza, todos la llamaban Cenicienta.
Un día el
rey de aquel país anunció que iba a dar una gran fiesta a la que invitaba a
todas las jóvenes casaderas del reino.
-Tú,
Cenicienta, no irás -dijo la madrastra-. Te quedarás en casa fregando el suelo
y preparando la cena para cuando volvamos.
Llegó el
día del baile y Cenicienta, apesadumbrada, vio partir a sus hermanastras hacia
el Palacio Real. Cuando se encontró sola en la cocina no pudo reprimir sus
sollozos.
-¿Por qué
seré tan desgraciada? -exclamó.
De pronto
se le apareció su Hada Madrina.
-No te
preocupes -exclamó el Hada-. Tú también podrás ir al baile, pero con una
condición: que cuando el reloj de Palacio dé las doce campanadas tendrás que
regresar sin falta.
Y
tocándola con su varita mágica la transformó en una maravillosa joven.
La
llegada de Cenicienta al Palacio causó honda admiración. Al entrar en la sala
de baile, el Príncipe quedó tan prendado de su belleza que bailó con ella toda
la noche. Sus hermanastras no la reconocieron y se preguntaban quién sería
aquella joven.
En medio
de tanta felicidad, Cenicienta oyó sonar en el reloj de Palacio las doce.
-¡Oh,
Dios mío! ¡Tengo que irme! -exclamó.
Como una
exhalación atravesó el salón y bajó la escalinata, perdiendo en su huida un
zapato, que el Príncipe recogió asombrado.
Para
encontrar a la bella joven, el Príncipe ideó un plan. Se casaría con aquella
que pudiera calzarse el zapato. Envió a sus heraldos a recorrer todo el Reino.
Las doncellas se lo probaban en vano, pues no había ni una a quien le fuera
bien el zapatito.
Al fin
llegaron a casa de Cenicienta, y claro está que sus hermanastras no pudieron
calzar el zapato, pero cuando se lo puso Cenicienta vieron con estupor que le
quedaba perfecto.
Y así sucedió que el Príncipe se casó con la
joven y vivieron muy felices.
La muerte viaja a caballo
Al atardecer, sentado en la silla de
cuero de becerro, el abuelo creyó ver una extraña figura, oscura, frágil y
alada volando en dirección al sol. Aquel presagio le hizo recordar su propia
muerte. Se levantó con calma y entró en la sala. Y con gesto firme, en el que
se adivinaba, sin embargo, cierta resignación, descolgó la escopeta.
A horcajadas en un caballo negro, por el
estrecho camino paralelo al río, avanzaba la muerte en un frenético y casi
ciego galopar. El abuelo, desde su mirador, reconoció la silueta del enemigo.
Se atrincheró detrás de la ventana, aprontó el arma y clavó la mirada en el
corazón de piedra del verdugo. Bestia y jinete cruzaron la línea imaginaria del
patio. Y el abuelo, que había aguardado desde siempre ese momento, disparó. El
caballo se paró en seco, y el jinete, con el pecho agujereado, abrió los
brazos, se dobló sobre sí mismo y cayó a tierra mordiendo el polvo acumulado en
los ladrillos.
La detonación interrumpió nuestras
tareas cotidianas, resonó en el viento cubriendo de zozobra nuestros corazones.
Salimos al patio y, como si hubiéramos establecido un acuerdo previo, en
semicírculo rodeamos al caído. Mi tío se desprendió del grupo, se despojó del
sombrero, e inclinado sobre el cuerpo aún caliente de aquel desconocido, lo
volteó de cara al cielo. Entonces vimos, alumbrado por los reflejos ceniza del
atardecer, el rostro sereno y sin vida del abuelo.
1. Responde las preguntas
a ¿Cuál
de los cuentos te gusto más? ¿Por qué?
La cenicienta
¿Cuál
de ellos logro captar más tu atención? ¿Por qué?
Por como la tratan
2. a partir de la lectura de los cuentos describe en el
siguiente cuadro loas diferencias que percibes.
Elemento
|
La
cenicienta
|
La
muerte viaja a caballos
|
Identificación
del autor
|
Anónimo
|
Enodio
quintero
|
Argumentos
|
Tiene
argumentos
|
Tiene
un argumento sencillo
|
Personajes
|
Cenicienta
las hermanas, la madrasta el hada madrina y el príncipe
|
La muerte,
el abuelo el nieto y el tío
|
Tiempo
y espacio en el que se desenvuelve
|
No
tiene tiempo y el espacio es en la
casa de cenicienta
|
El
tiempo se sitúa en el atardecer de un día y el espacio en un patio de una
casa
|
Leguaje
utilizado
|
Sencillo
|
Sencillo
|
Intención
del autor
|
Actitud
moralizante
|
Interesar
al lector
|
Cuento literario
Durante el romanticismo,
desarrollado a finales del siglo XVIII y durante el siglo XIX, se dio origen a
dos principales categorías de cuento: el infantil y el de suspenso.
El cuanto infantil se
caracteriza por estar enfocado en la revaloración de lo popular, por lo que
recupera los elementos de los cuentos tradicionales, en los que se vuelven a retomar la intención moralizante y se
refleja el antagonismo de los personajes así el triunfo del bien sobre el mal. La
apricion de elementos maravillosos se manifiesta tanto en los personajes
(brujas, duendes, gigantes, ogros, hadas) como en las situaciones rodeadas
normalmente de magia y encantamiento. En esta categoría sobresales los autores
como Hans Christian Andersen, con el
patito feo, el soldadito de plomo, la sirenita etc.
El cuento de suspenso se
caracteriza por situar al lector en un estado de tensión, expectación o
incertidumbre, resultado de la atmósfera de misterio, oscuridad y
desconocimiento. El cuento de suspenso, es considerado el antecedente de
corrientes popularizadas en el siglo XX, como son el cuento de terror y el
detectivesco.
A inicios del siglo XIX, en el
que se desarrolló la corriente literaria del realismo, el cuanto realista tuvo
un gran auge.se basa en la presentación
de hechos reales o imitados de la realidad, con el fin de crear un efecto de
verosimilitud. El cuento realista surge de la observación directa del entorno y
de la vida en sus diversos aspectos:religioso, social, moral, histórico etc.,
buscando reflejar de forma seria la realidady brindar un testimonio de esta,
tal y como es.
Durante el siglo XX, en la
época contemporánea, se desarrollan diversas categorías, como son el relato indigenista,
el relato urbano, la literatura fantástica y el realismo mágico con un gran
auge en Hispanoamérica, y los cuantos de terror, detectivescos y de ciencia
ficción.
El relato indigenista, tiene
como propósito exhibir las formas de vida de los distintos grupos étnicos de america , reflejando sus problemáticas:
marginación, abusos, entre otros.
A diferencia del relato
indigenista, el relato urbano busca representar el estilo de vida de las ciudades y sus pobladores lo que da pie
a la generación de escenarios temas y personajes.
La literatura fantástica y el
realismo mágico tratan de ubicar al lector en situaciones reales desde el punto
de vista geográfico, temporal y cultural, en los que suceden situaciones
inexplicables que alteran la realidad.
Estas dos corrientes se diferencian en la literatura fantástica busca crear
angustia en el lector ante la posibilidad de lo que ocurre en la narración,
pueda suceder en la vida real; mientras que el realismo mágico busca mostrar lo
extraño o inexplicable como algo cotidiano y común.
Los cuentos de terror, busca
producir el miedo psicológico, así como sus efectos físicos, a través del
planteamiento de sus situaciones y personajes.
Los cuentos o relatos
de ciencia ficción se caracterizan por utilizar elementos propios de la ciencia
y la tecnología y especular sobre las consecuencias que estos pueden tener en
el desarrollo futuro de la humanidadACTIVIDAD 3
EL
ALBUM
El consejero administrativo Craterov, delgado y seco como la flecha del Almirantazgo,
avanzó algunos pasos y, dirigiéndose a Serlavis, le dijo:
-Excelencia: Constantemente alentados y conmovidos hasta el fondo del
corazón por vuestra gran autoridad y paternal solicitud...
-Durante más de diez años -le sopló Zacoucine.
-Durante más de diez años... ¡Jum!... En este día memorable, nosotros,
sus subordinados, ofrecemos a su excelencia, como prueba de respeto y de
profunda gratitud, este álbum con nuestros retratos, haciendo votos porque su
noble vida se prolongue muchos años y que por largo tiempo aún, hasta la hora
de la muerte, nos honre con...
-Sus paternales enseñanzas en el camino de la verdad y del progreso
-añadió Zacoucine, enjugándose las gotas de sudor que de pronto le habían
invadido la frente. Se veía que ardía en deseos de tomar la palabra para
colocar el discurso que seguramente traía preparado.
-Y que -concluyó- su estandarte siga flotando mucho tiempo aún en la
carrera del genio, del trabajo y de la conciencia social.
Por la mejilla izquierda de Serlavis, llena de arrugas, se deslizó una
lágrima.
-Señores -dijo con voz temblorosa-, no esperaba yo esto, no podía
imaginar que celebraran mi modesto jubileo. Estoy emocionado, profundamente
emocionado, y conservaré el recuerdo de estos instantes hasta la muerte.
Créanme, amigos míos, les aseguro que nadie les desea como yo tantas
felicidades... Si alguna vez ha habido pequeñas dificultades... ha sido siempre
en bien de todos ustedes...
Serlavis, actual consejero de Estado, dio un abrazo a Craterov,
consejero de estado administrativo, que no esperaba semejante honor y que
palideció de satisfacción. Luego, con el rostro bañado en lágrimas como si le
hubiesen arrebatado el precioso álbum en vez de ofrecérselo, hizo un gesto con
la mano para indicar que la emoción le impedía hablar. Después, calmándose un
poco, añadió unas cuantas palabras muy afectuosas, estrechó a todos la mano y,
en medio del entusiasmo y de sonoras aclamaciones, se instaló en su coche
abrumado de bendiciones. Durante el trayecto sintió su pecho invadido de un júbilo
desconocido hasta entonces y de nuevo se le saltaron las lágrimas.
En su casa lo esperaban nuevas satisfacciones. Su familia, sus amigos y
conocidos le hicieron tal ovación que hubo un momento en que creyó sinceramente
haber efectuado grandes servicios a la patria y que hubiera sido una gran
desgracia para ella que él no hubiese existido. Durante la comida del jubileo
no cesaron los brindis, los discursos, los abrazos y las lágrimas. En fin, que
Serlavis no esperaba que sus méritos fuesen premiados tan calurosamente.
-Señores -dijo en el momento de los postres-, hace dos horas he sido
indemnizado por todos los sufrimientos que esperan al hombre que se ha puesto
al servicio, no ya de la forma ni de la letra, si se me permite expresarlo así,
sino del deber. Durante toda mi carrera he sido siempre fiel al principio de
que no es el público el que se ha hecho para nosotros, sino nosotros los que
estamos hechos para él. Y hoy he recibido la más alta recompensa. Mis
subordinados me han ofrecido este álbum que me ha llenado de emoción.
Todos los rostros se inclinaron sobre el álbum para verlo.
-¡Qué bonito es! -dijo Olga, la hija de Serlavis-. Estoy segura de que
no cuesta menos de cincuenta rublos. ¡Oh, es magnífico! ¿Me lo das, papá?
Tendré mucho cuidado con él... ¡Es tan bonito!
Después de la comida, Olga se llevó el álbum a su habitación y lo guardó
en su secreter. Al día siguiente arrancó los retratos de los funcionarios, los
tiró al suelo y colocó en su lugar los de sus compañeras de colegio. Los
uniformes cedieron el sitio a las esclavinas blancas. Colás, el hijo pequeño de
su excelencia, recortó los retratos de los funcionarios y pintó sus trajes de
rojo. Colocó bigotes en los labios afeitados y barbas oscuras en los mentones
imberbes. Cuando no tuvo nada más para colorear, recortó siluetas y les
atravesó los ojos con una aguja, para jugar con ellas a los soldados. Al
consejero Craterov lo pegó de pie en una caja de fósforos y lo llevó colocado
así al despacho de su padre.
-Papá, mira, un monumento.
Serlavis se echó a reír, movió la cabeza y, enternecido, dio un sonoro
beso en la mejilla a Nicolás.
-Anda, pilluelo, enséñaselo a mamá para que lo vea ella también.
Cuento:
|
El
álbum
|
Autor:
|
Antón
Chejov
|
Categoría
|
Ciento
realista
|
Características
que justifican la pertenencia a la categoría
|
|
El
autor refleja una escena real
Utiliza
un lenguaje común
Representa
la corriente literaria del realismo
|
ESTRUCTURA EXTERNA E INTERNA DEL CUENTO
Para comprender un cuento, es necesario
conocer el entorno en el que fue escrito, el cual se encuentra determinado por
los siguientes elementos:
· * Autor. Atraviesa por diversas circunstancias que
defines su historia y su personalidad. Es común que el cuento se vea influido por los rasgos psicológicos,
experiencias y hechos vividos por el autor, por lo que es importante conocer
las circunstancias de su vida, con el fin de tener mayor claridad sobre su
obra.
·
* Momento histórico. Son los acontecimientos
sociales, políticos, económicos, culturales y religiosos, entre la época en que
se desarrolla el cuento. Conocer estos
factores nos permite interpretar
adecuadamente el texto.
·
* Corriente literaria. Lo integran las
características, ideológicas o principios del conjunto de obras alas que
pertenecen, y que a su vez, están determinadas por el momento histórico.
EXTRUCTURA DEL TEXTO
El cuento está
compuesto por diversos elementos. Los cuales poseen características propias que
permiten la identificación de este subgénero. A continuación se describen
brevemente cada uno de ellos:
Tema. Permite
conocer sobre qué trata la obra. El cuento se caracteriza porque maneja
solamente un tema, que puede estar relacionado con el amor, terror, ficción,
aventura, entre otros.
Personajes. Son creados por el autor para
tomar parte en las acciones: personajes históricos, seres fantásticos,
animales, etc. Se clasifican en protagonistas, antagonistas, secundarios e
incidentales
Narrador. Es la voz que cuenta y relata
los sucesos. La voz enunciativa que utiliza el escritor: primera, segunda o
tercera persona. Los hay de diferentes tipos: autodiegético, intradiegético,
extradiegético y metadiegético
·
Hechos. Se refiere a las acciones de los
personajes. En este elemento se da cuenta tanto de hechos reales como
fantásticos, partiendo en todo momento de una base de ficción
·
Espacio. Se refiere a espacios
físicos, es decir, los lugares donde se sitúan los personajes y donde suceden
los hechos. El espacio es real, cuando corresponde a lugares tales como una
casa, un patio, la escuela, la calle, etc.; e imaginario, cuando no existe.
Tiempo. Es la época en que se ambienta la
historia y la duración del suceso narrado. Por lo tanto, se debe distinguir
entre tiempo externo e interno
_ Externo. Se refiere
al tiempo en que se sitúa lo narrado, es la época o el periodo histórico en que
se desarrolla la acción. Puede ser explícito o deducirse a partir del ambiente,
los personajes, las costumbres, etc.
_ Interno. Es el tiempo que duran los acontecimientos
narrados en la historia. Puede ser toda una vida o varios días; o bien, el
autor selecciona los momentos que considera interesantes y omite aquellos que
considera innecesarios. Respecto a la transición interna del tiempo en el
cuento, aparece marcada mediante formas del tipo Más tarde, Al día
siguiente, Por la noche, Por la mañana, etc.
·
Lenguaje. Comprende el estilo y la
forma de expresión que utiliza el autor.
- Estilo. Corresponde
a la manera particular que tiene el escritor para utilizar el lenguaje, de
manera que, al ser un reflejo de su personalidad, le da un carácter propio a su
obra. En este sentido, podemos decir que hay tantos estilos como escritores. A
manera de ejemplo, mencionaremos que hay autores que utilizan la sonoridad de
las palabras para lograr un efecto poético; otros adornan su texto para lograr
una mayor expresividad; otros prefieren la exactitud y eliminan todo elemento
decorativo con la finalidad de crear un mundo más conceptual.
- Formas de
expresión. Son los recursos expresivos utilizados para el desarrollo de la
narración. El uso del lenguaje está estrechamente relacionado con el tipo de
cuento: cotidiano, metafórico, científico, etc., así como con el recurso
empleado para el desarrollo de la historia: narración, descripción o diálogo.
Existen otros elementos que también influyen en el desarrollo del
cuento, como lo son la atmósfera, es decir, el estado emocional que
predomina en la historia: misterio, violencia, tranquilidad, angustia; y el tono,
es decir, la actitud del autor ante lo que está presentando, que puede ser
humorístico, irónico, sarcástico, desafiante, persuasivo, cínico, melancólico,
entre otros.
El niño
cantor
Dicen que hace mucho tiempo
un niño de un pueblo sin nombre tenía la voz más hermosa que se había escuchado
hasta ese momento, este niño dicen algunos que no era rico, ni presumía de su
grandiosa voz, y que el iba por todo el reino cantando y prestando su voz a
quien le pidiera que cantara incluso cantaba en hospitales de niños y orfanatos
para disminuir la infelicidad de las personas, eso si, muchas personas contaban
que este pequeño niño atribuía su gran don a sus horas de esfuerzo pues cada
noche practicaba sus canciones hasta que el sol salía y que sólo así se podía
ir a dormir, hasta que quedaba exhausto de cantar toda la noche.
ORIGEN DE LA NOVELA
De mayor
extensión que el cuento, la novela es un arte moderno; entendida como “un
relato en prosa impreso en forma de libro, cuyos diversos elementos
constitutivos… por mucho que varíen de una a otra, conforman un género distinto
a cualquier tipo de manifestación narrativa existente con anterioridad”.
Su historia
tiene alrededor de cuatro siglos; y es que, aunque el relato existía desde
tiempos remotos, no fue sino hasta hace cuatrocientos años que la narración fue
cobrando formas distintas, hasta constituirse en la novela. Ésta, en lo
fundamental, conserva la estructura del género al que pertenece, la
narrativa: que es un acto comunicativo en el que el emisor (autor) envía un
mensaje (el texto de la novela) a un lector a través de un mediador interno
(narrador), como has visto en los bloques anteriores.
La novela
surge de la épica y así se mantiene durante la Antigüedad y en la Edad Media; a
esta segunda época pertenecen particularmente las historias de caballerías.
Vendría después el Renacimiento, el periodo artístico que dejaría atrás la
oscuridad de los siglos VI al XV. Coexisten el idealismo en las narraciones
pastoriles y el realismo de la novela picaresca.
En general,
el origen de la novela moderna se sitúa en el Occidente europeo, cuando se
forja la distancia con los textos narrativos clásicos, con una obra que, no
obstante su carácter religioso, marcó el inicio de la relación lector-obra con
significados diferentes a aquél: la Biblia.
Ese
acercamiento lector-relato con los textos bíblicos fue el punto de quiebre de
la redefinición de la novela como subgénero. La Real Academia Española recoge
dicha condición: la novela es una “obra literaria en prosa en la que se narra
una acción fingida en todo o en parte, y cuyo fin es causar placer estético a
los lectores con la descripción o pintura de sucesos o lances interesantes, de
caracteres, de pasiones y de costumbres.
Renacimiento.
Es la época de la contrarreforma, que considera la culminación de
la literatura religiosa y patriótica. Marca la ruptura con diez siglos de oscuridad,
con una revitalización de las diferentes artes. A partir del siglo XIV, en
Italia (particularmente en Florencia) y luego en toda Europa Occidental, entre
descubrimientos marítimos y la invención de la imprenta, se da el reencuentro
con los clásicos. El Renacimiento perduró hasta el siglo XVIII.
Barroco. Como en
otras expresiones del arte (por ejemplo, en la pintura), la novela barroca se
caracteriza por cierta exageración y por el pesimismo. Sin embargo, hay
grandes obras y creadores de este periodo, como Lope de Vega con El
peregrino en su patria, Tirso de Molina con Los cigarrales de Toledo,
y Pedro Calderón de la Barca con La vida es sueño
Neoclasicismo. Surgió en
el periodo de la Ilustración y se centraba en el culto a la razón. Fueron los
tiempos de los enciclopedistas, pero también del acercamiento a las mayorías.
En Francia hubo figuras representativas como Francois Voltaire y Jean-Jacques
Rousseau.
Romanticismo. Las obras
románticas tienen como característica la exaltación de los sentimientos
humanos. Se desarrolló de manera significativa en la poesía, pero en prosa
también hubo creación. Entre los autores destacados está Víctor Hugo, el autor
de Los miserables.
Realismo. Fue la respuesta al
romanticismo y su origen fue a mediados del siglo XIX. La Revolución Industrial
y los abusos cometidos contra los trabajadores, motivaron a los escritores a
denunciar, mediante la literatura, lo que ocurría. Entre los principales
representantes están el británico Charles Dickens, los franceses Gustavo
Flaubert y Honorato de Balzac.
Vanguardia. Originado en Europa, este
movimiento se caracteriza por una intensa búsqueda del espíritu de libertad,
la búsqueda de la originalidad y el rechazo a las fórmulas retóricas, señala
Celinda Fournier (2002). En la vanguardia confluyen movimientos con diferente
perspectiva tales como el surrealismo, el fauvismo, el dadaísmo, el impresionismo
y el expresionismo, entre los más conocidos.
Contemporaneidad. Está
marcado por el término de la Segunda Guerra Mundial y tal vez su característica
principal es que se busca reflejar la vida, no sólo en términos contextuales,
sino de fondo, como el pensamiento, la preocupación, los sentimientos que
mueven al hombre actual. Entre sus representantes, hay una larga lista, con
diversos estilos narrativos, pero todos de indudable solidez: Marcel Proust,
Jorge Luis Borges, Jean Paul Sartre, Albert Camus, Ernest Hemingway y José
Saramago.
Si bien la novela es el subgénero hermano del
cuento, tiene características que la diferencian de éste; la más evidente es la
extensión. La novela se prolonga temporalmente, el cuento es breve en este
sentido. Existen otras cualidades que identifican la novela, como la inclusión
de un número de personajes tan amplio como lo requiera la trama, además de que
la caracterización de éstos es mucho más detallada y profunda que en el cuento.
La trama, por su parte, puede derivar en otras de menor intensidad, pero que
permiten desarrollar de forma minuciosa y más descriptiva las historias de los
personajes, lo mismo que la representación de escenarios pequeños que conforman
la historia general. La novela moderna también se define por su redacción en
prosa.
Para
Francisco Montes de Oca (2006), la novela es un subgénero complejo que toma un
poco de todos los géneros literarios. De la épica, por ejemplo, maneja el
pasado, pero no absoluto, puesto que considera la evolución de los personajes.
Tiene, asimismo, un fondo lírico, porque refleja una postura de vida o una
concepción del mundo. Del drama, recupera la forma del conflicto y la tensión
del hombre con él mismo o con la sociedad.
En este
último aspecto se centra la condición más significativa de la novela. ¿La
recuerdas? La novela es la búsqueda de la expresión del ser humano, de la
explicación de su naturaleza, de su condición, de su relación con los otros y
con su entorno. Nada de ello es fácil de narrar y, menos aún, de acercar al
lector a la historia impresa en sus páginas.
Pero la
novela también ofrece la libertad de que su autor elija el contenido y la
forma, lo que derivará en la tipología que veremos más adelante. Es un
subgénero, hasta cierto punto, flexible y noble, pero no por eso sencillo.
Por otra
parte, puede ser de carácter ficticio, pero también puede optar por incluir
aspectos de la realidad, de la historia.
ELEMENTOS DE LA NOVELA
Los dos
constituyentes fundamentales de una obra narrativa son la historia y el
discurso, cita Fourier Marcos (2002). La historia, expone: “consiste en la
relación de sucesos narrados; el discurso es la forma en cómo son presentados
los hechos por el narrador, incluye los recursos de los que se vale el autor
para decirlo. La historia es lo que se narra y el discurso es cómo se narra”.
Dice
Goytisolo (2013) que la novela “es un relato en prosa impreso en forma de
libro, cuyos diversos elementos constitutivos – argumento, personajes,
estructura, estilo, etc., – por mucho que varíen de una obra a otra, conforma
un género distinto a cualquier tipo de manifestación narrativa existente con
anterioridad”. Así pues, esta es otra distinción que caracteriza a la novela:
sus elementos principales pueden ser diferentes de una obra a otra, pero eso no
quita que la novela, como subgénero, tenga un sello de identidad común.
Aunque
hay diferentes orientaciones de clasificación, si nos guiamos por la historia y
el discurso como elementos rectores, en la primera se consideran los
personajes, las acciones, las funciones y las esferas de acción; y en el
discurso se contempla la forma en cómo se hace la narración, que puede ser
externa o interna.
ELEMENTOS DE LA NOVELA
ESTRUCTURA
EXTERNA E INTERNA DE LA NOVELA
En el análisis de una novela es primordial considerar su
estructura. La intención es dividir los diferentes elementos, pero no de modo
que queden atomizados o separa dos, sino que su unidad permanezca. Los
personajes, las relaciones tiempo-espacio, la acción, el lenguaje, conforman
un todo.
Hemos enfatizado en que una condición primordial de la
novela moderna es la posi bilidad que brinda al lector de acercarse a la obra
que tiene en sus manos.
Estructura externa
Así pues, al analizar una novela desde su estructura
externa, debes identificar los hechos históricos y culturales predominantes en
el momento en que se escribe, así como determinar qué tanto influyen en la
historia.
El autor siempre está presente, aunque no se note, en una
obra. Escribe dentro de un contexto particular, tanto histórico, como social o
cultural, pero siempre con un propósito estético. Por eso conviene que conozcas
sobre su vida (biografía) y la corriente o movimiento literario con el que se
le identifica. Al leer su biografía, obtendrás datos que particularmente pueden
apoyarte: su ideología, sus relaciones interpersonales, su actividad social,
entre otros.
Estructura interna
En cuanto a la estructura interna, como expone el
Diccionario Akal de términos literarios, hay que considerar los problemas que
plantea el autor en su obra. Los problemas se refieren al contenido y en él,
seguramente habrá una intención comunicativa. Asimismo, debes recordar que en
toda narración hay tres partes en su estructura interna: planteamiento, nudo o desarrollo y desenlace,
que en el caso de la novela tiene generalmente un tratamiento largo, a
diferencia de lo que ocurre en el cuento. Veamos cada uno:
Planteamiento.
Muestra los aspectos temporales y espaciales (cuándo y dónde) se desarrollará
la acción. Presenta también a los personajes.
Nudo o desarrollo. Se
relaciona con el conflicto que se presenta en la historia que, en la novela,
puede ser más de uno.
Desenlace. Es el momento en que se soluciona el conflicto.
La estructura interna de la novela se relaciona con el
texto, es decir, con lo que está escrito. Ese nivel interno se puede observar a
través de los personajes, el tipo de narrador, la acción, tiempo, espacio,
ambiente y el lenguaje.
Personajes. Existen
diferentes tipos de personajes y es conforme a su intervención en la trama
principal, que se define si son principales, secundarios o incidentales. Los
personajes principales son aquellos sobre los que cae el peso de la trama y
aparecen a lo largo de toda la historia. Los secundarios tienen una participación
más o menos significativa, pero de menor trascendencia en la trama central y se
relacionan con los personajes principales de algún modo. Los incidentales
tienen una presencia esporádica en la historia y, generalmente, tienen una
relación de casualidad con los protagonistas.
Narrador. Hay diferentes tipos de narradores, como
has visto, pero vamos a recordarlos. Se clasifican según la persona gramatical
que se emplea al dirigirse al lector. Sabemos que el escritor está presente a
través del narrador, pero como tal, es ajeno a la historia. Los tipos de
narradores que pueden intervenir en la novela son: autodiegético,
intradiegético, extradiegético o metadiegético.
Acción. Aquí se contemplan el tiempo, el espacio y
la relación en que ocurre la historia.
El tiempo. Como seguramente recuerdas, en la narración
existen diferentes tiempos, por llamarlo de alguna forma. Por una parte está
el tiempo de la narración, referida a la lectura del texto, y por otro, el
tiempo narrativo, relacionado con el tiempo que transcurre dentro del relato,
expone Ramos (2013).
En el texto de la misma autora, se exponen los cuatro tipos
de narración según el tiempo gramatical que se emplee. Tales son:
Retrospectiva. El
narrador cuenta un hecho ocurrido en el pasado. Los tiempos gramaticales
empleados son el pretérito y el copretérito. Ejemplo: Apenas Rowena se había sentado, fue saludada por las trompetas y las
aclamaciones de los espectadores.
Prospectiva. La
historia se expone pensando a futuro. Generalmente se hace en segunda persona y
es como si el narrador se situara temporalmente en el pasado de lo que relata.
En este caso, un ejemplo es Crónica de
una muerte anunciada, de Gabriel García Márquez, en la que inicia con el
desenlace para luego narrar lo sucedido.
Simultánea. El
narrador es parte de la narración y, como está en la historia, utiliza el
presente. En La náusea, de
Jean-Paul Sartre, puedes observarlo: No
puedo decir que me sienta aligerado; al contrario, eso me aplasta. Sólo que
alcancé mi objetivo: sé lo que quería saber;…
Intercalada. La
narración es retrospectiva y simultánea, para relatar lo que pasó y lo que
ocurre en el presente.
Espacio. Es el imaginario físico en que ocurre la
historia. Así, por ejemplo, en El
sueño del celta, el espacio del fragmento que leímos es la celda. Según
sea el autor, la descripción puede ser más o menos abundante o minuciosa.
Ambiente. Está integrado por el escenario, la época
y la atmósfera.
Lenguaje. Es un elemento fundamental pues, es el que representa la
presencia del autor en la historia. Tiene que ver con su habilidad para
describir, para acercar al lector a la historia que quiera contar, para
hacerle sentir. Mediante las palabras, y valiéndose de los recursos literarios
el autor crea escenarios e imágenes, que pueden resultar atractivos al lector.
Cien años de soledad
Gabriel García Márquez
Muchos
años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía
había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el
hielo. Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y caña brava
construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un
lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo
era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas
había que señalarías con el dedo. Todos los años, por el mes de marzo, una
familia de gitanos desarrapados plantaba su carpa cerca de la aldea, y con un
grande alboroto de pitos y timbales daban a conocer los nuevos inventos.
Primero llevaron el imán. Un gitano corpulento, de barba montaraz y manos de
gorrión, que se presentó con el nombre de Melquiades, hizo una truculenta
demostración pública de lo que él mismo llamaba la octava maravilla de los
sabios alquimistas de Macedonia. Fue de casa en casa arrastrando dos lingotes
metálicos, y todo el mundo se espantó al ver que los calderos, las pailas, las
tenazas y los anafes se caían de su sitio, y las maderas crujían por la
desesperación de los clavos y los tornillos tratando de desenclavarse, y aun
los objetos perdidos desde hacía mucho tiempo aparecían por donde más se les
había buscado, y se arrastraban en desbandada turbulenta detrás de los fierros
mágicos de Melquíades.
«Las
cosas, tienen vida propia -pregonaba el gitano con áspero acento-, todo es
cuestión de despertarles el ánima.» José Arcadio Buendía, cuya desaforada imaginación
iba siempre más lejos que el ingenio de la naturaleza, y aún más allá del milagro
y la magia, pensó que era posible servirse de aquella invención inútil para
desentrañar el oro de la tierra. Melquíades, que era un hombre honrado, le
previno: «Para eso no sirve.» Pero José Arcadio Buendía no creía en aquel tiempo
en la honradez de los gitanos, así que cambió su mulo y una partida de chivos
por los dos lingotes imantados.
MI
COMENTARIO:
Este fragmento nos da a conocer como vivía la
gente de la aldea de macondo y de cómo convivan. Pero más que nada es importante porque le están
dando importancia a ese lugar pequeño. De cómo los gitanos llegaron a esa aldea
a mostrarles su nuevo invento que era el imán y con ello pudieran encontrar sus
cosas que habían perdido.